El arquitecto Rafael de la Hoz explica las curiosidades de las obras del Góngora.
La sala polivalente del Teatro Góngora "brillará como un faro de cultura permanente" gracias a su cuerpo acristalado y dorado. Así la ve el autor del proyecto de reforma, Rafael de la Hoz, que ha optado por "un dorado, entre vidrios, que no envejece", por el que se ha decidido siguiendo la tradición andaluza de "rematar los edificios públicos con un destello para que el visitante vea el brillo desde lejos". En esa tradición se inspiró cuando diseñó la peculiar sala que alberga la antigua azotea que fue cine de verano. Finalmente, De la Hoz ha empleado un "tipo de cubrición dorada siguiendo un sistema único en el mundo, con vidrio", que la hace "inalterable".
Aunque las obras del Teatro Góngora terminaron a primeros de mes y el lunes 9 de mayo abrió sus puertas para la entrega de los premios Maximinos , Rafael de la Hoz explica que aún faltan algunos detalles, como concluir la fachada, cuya pintura hay que "igualar, restaurar y terminar de adecuar", labor que calcula que puede requerir un par de semanas. Durante las obras, "se ha buscado el color original", tarea que se ha realizado con "paciencia, decapando los añadidos hasta llegar al origen", el que tuvo el antiguo cine en 1933.
PÚBLICADO EN EL DIARIO DE CÓRDOBA EL 22/05/11
No hay comentarios:
Publicar un comentario