Más de medio millar de personas, según la Policía Local, se han concentrado hoy con pancartas escritas en inglés, italiano y español para protestar por el anuncio de cierre de la factoría cordobesa Locsa, perteneciente a la multinacional italoalemana KME, previsto para el 30 de junio.
El acto, que ha tenido lugar en el centro de la capital y que ha finalizado con una marcha por el Bulevar de Gran Capitán, ha conseguido reunir a los principales líderes de IU, PP, PSOE, PA, CCOO y UGT, que se han colocado en la primera línea de la concentración junto a un pancarta que rezaba "Córdoba dice ¡No al cierre de Locsa!".
PÚBLICADO EN EL DIARIO DE CÓRDOBA EL 16/04/11
Unas 1.000 personas recorren la ciudad en apoyo a los trabajadores de Locsa y en rechazo del cierre
"Hemos invitado a unirse a la movilización a todos sin distinción de colores, porque el problema es de ciudad, como se ha estado demostrando", insiste Pozuelo, que asegura que "no se puede perder esta industria y esta fuente de riqueza".
Alrededor de un millar de personas han participado este sábado en una concentración y la posterior manifestación por el Bulevar del Gran Capitán de Córdoba para mostrar su apoyo a los trabajadores de Locsa y rechazar el cierre de las instalaciones.
Según ha explicado el presidente del comité de empresa de Locsa, Francisco Pozuelo, a Europa Press, la manifestación se ha iniciado a mediodía en el entorno de la Iglesia de San Nicolás y hasta el Bulevar del Gran Capitán, una movilización en la que ha participado también el primer edil de la ciudad y candidato a la Alcaldía por IU, Andrés Ocaña, junto a los alcaldables por el PSOE, Juan Pablo Durán, y por el PP, José Antonio Nieto.
Marcha contra el cierre de Locsa
Desde el Comité de Empresa de la factoría han querido recordar que los sindicatos han propuesto en "más de una ocasión" a los directivos que pusieran a la venta la empresa a un precio razonable, pero que ahora lo "único" que tienen es el cierre, explica Francisco Pozuelo, presidente del comité. Así, recalca que la venta debe hacerse "teniendo en cuenta el cómo", puesto que entienden que la cantidad que supuestamente quiere poner la multinacional "es superior, en gran medida, a lo que vale la instalación" y que así resultaría "imposible" que alguien la adquiriera.
Pozuelo explica que el cierre supondría un "hito histórico" para Córdoba porque es una empresa a la que le faltan seis años para cumplir un siglo y que además "redundará negativamente" porque se trata de una fábrica que exporta material al resto del mundo. En este sentido, se muestran con "esperanza" de remediar el posible cierre a partir de las negociaciones que mantendrán con directivos de la empresa a partir del 26 de abril.
PÚBLICADO EN DIA DE CÓRDOBA EL 16/04/11
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