Aunque las molestias que podrían ocasionar las obras del centro de salud Santa Victoria -Sector Sur- se daban por hecho, tanto profesionales como pacientes del ambulatorio no imaginaban que llegarían al límite de tener que recurrir al uso de las mascarillas para evitar la inhalación del polvo que genera la obra. Según informaron a El Día fuentes del Sindicato Médico de Córdoba (Simec), hace días que parte del personal que trabaja en estas instalaciones, sobre todo administrativos, auxiliares y otros empleados de la planta baja del edificio, se ve obligado a valerse de este artículo por el picor de ojos y los estornudos que empezaban a sufrir. Éste es tan sólo uno de los inconvenientes causados por una actuación que se inició el pasado octubre y que se convertirá en la mayor remodelación en la historia de esta construcción de finales de la década de los 60.
PÚBLICADO EN EL DÍA DE CÓRDOBA EL 25/11/10
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